La mejora registrada en el mercado disponible local de soja fue el reflejo del cierre alcista de los negocios en la Bolsa de Chicago y de la competencia interna, que existe entre las fábricas y los exportadores.
Por tonelada de soja con entrega en el corto plazo, los exportadores pagaron $ 1150, en Rosario, y $ 1140, en Bahía Blanca, $ 50 más que el viernes pasado. Las fábricas, en tanto, ofrecieron $ 1140 en las terminales de Timbúes, San Lorenzo, San Martín, Ricardone y General Lagos, $ 50 por encima del valor vigente durante la rueda anterior.
La soja de la nueva cosecha, con destino a la exportación, se negoció a US$ 355 en San Martín, Arroyo Seco y Lima, con una ganancia de diez dólares. La mercadería para las fábricas se cotizó a US$ 352 en Timbúes, San Martín y Arroyo Seco, con un alza de 12 dólares.
En el Mercado a Término de Buenos Aires (Matba) las posiciones mayo y noviembre de la soja aumentaron US$ 5 y 4,50, mientras que sus ajustes fueron de US$ 348 y 362 por tonelada.
Las pizarras de Chicago mostraron subas de US$ 8,41 y 8,82 sobre los contratos mayo y julio de la soja, cuyos ajustes resultaron de US$ 572,98 y 576,88 por tonelada. Al igual que el viernes, la firmeza del mercado de aceites fue la que sostuvo al resto del complejo sojero. La fuerte demanda mundial por aceites vegetales hizo que ayer también se alcanzaran fuertes subas en las bolsas de China, Malasia y Rotterdam.
Ganancias para el girasol
El girasol también se benefició del favorable contexto internacional existente para los aceites vegetales. Ayer las fábricas pagaron $ 1400 por tonelada disponible en Rosario y Ricardone, $ 100 más que el viernes pasado. El mismo valor fue ofrecido en San Martín y Junín, aunque en esos casos implicó ganancias de 50 y 30 pesos, respectivamente. En Necochea y Bahía Blanca la oleaginosa se cotizó a $ 1400 y a 1390 por tonelada, con subas de 125 y 110 pesos.
Por girasol con entrega en abril los compradores pagaron US$ 440 por tonelada en Rosario y Ricardone, 10 dólares más que el viernes pasado.
En el Matba, donde el volumen negociado de girasol es aún escaso, la posición marzo subió 5 dólares y cerró con un ajuste de US$ 435 por tonelada.
Respecto del maíz, los exportadores pagaron $ 507 por tonelada disponible en San Martín y San Lorenzo, $ 7 más que el viernes, y $ 505 en Timbúes, General Lagos, Rosario, Ramallo, San Nicolás y Punta Alvear, $ 5 por encima del valor vigente en la rueda anterior.
El maíz de la nueva cosecha se cotizó a US$ 165 por tonelada en Bahía Blanca y a US$ 162 en Lima y Timbúes, con mejoras de US$ 2 y 4, respectivamente.
Las posiciones abril y julio del maíz en el Matba subieron US$ 2 y concluyeron la rueda con ajustes de US$ 159,50 y 162,50 por tonelada.
En Chicago los contratos mayo y julio del maíz aumentaron US$ 3,90 y 3,82, mientras que sus ajustes resultaron de US$ 222,98 y 227,63 por tonelada. El aporte de los fondos de inversión, que ayer fueron firmes compradores de materias primas, le permitieron al cereal cerrar en alza.
Por último, en trigo sólo se conocieron los valores propuestos por los molinos (entre $ 545 y 645), dado que los exportadores se mantuvieron retirados de los puertos. En el Matba, la posición enero aumentó US$ 1,30 y cerró con un ajuste de US$ 202,80.
En Chicago y Kansas el contrato mayo del trigo subió US$ 6,02 y 3,89, mientras que su ajuste fue de US$ 405,06 y 430,12, respectivamente.
