En el lugar se observa que el depósito de los residuos está sumamente desbordado y los olores nauseabundos se perciben desde varios metros de distancia.
“Queremos que el intendente (José) Halle venga en algún momento para que vea las condiciones en que está el contenedor”, dijo una personal de maestranza del nosocomio y señaló que los malos olores perjudican a las personas que se encuentran internadas.
“Acá hay pañales, residuos patológicos”, además de la basura domiciliaria, lo cual forma un peligroso minibasural. Las personas que pasan por el lugar, principalmente niños que asisten al complejo hogar Eva Perón, están expuestos a las bolsas rotas entre las que hay sondas, agujas, jeringas, y guantes de látex usados. “Pedimos que por favor vengan a retirar la basura lo más pronto posible”, solicitó la trabajadora. Desde que la comuna instrumento la descentralización de los servicios, el recolector no ha dado señales por la zona del hospital Pascual Palma. El Once Digital